«El ciclista con bigote» y la ilustración en acuarela
¿Te gusta la ilustración en acuarela? Pues hoy vamos a hablar de ella porque sabemos lo importante que son las ilustraciones en los cuentos infantiles. Cumplen un papel fundamental ya que es un reclamo para que los niños y las niñas elijan ese libro como lectura entre muchos otros. Ilustrar un álbum es un trabajo solitario de varios meses. Una práctica que se convierte en el estilo de vida de muchos autores. En esta ocasión, entrevistamos a José Luis Ocaña, el ilustrador de nuestro primer libro publicado: «El ciclista con bigote». Una historia divertida escrita por Cristina Expósito Escalona y editada por Alaestrella. Con este libro arrancamos nuestro sello editorial y con él que ganamos el IX Premios Ilustrados Plastilina y Amigos al mejor libro editado en 2020, según la opinión de librerías, blogs de literatura infantil y juvenil, y lectores.
Si quieres conocer a este artista que domina la ilustración en acuarela, te invitamos a que leas esta entrevista.
1. ¿Qué significa para ti una ilustración en acuarela? ¿Qué te transmite?
La frescura, algo de improvisación porque nunca sabes qué tipo de mancha se va a terminar creando. La viveza del tono y la suavidad con la que se mezclan los colores. Esto hace que una ilustración con acuarela tenga un sello tan personal y espontáneo.
2. ¿Cómo fue el proceso de ilustrar El ciclista con bigote?
Pues ante una historia tan dinámica y desenfadada, pienso que la acuarela iba de la mano con la historia; el personaje principal es un caramelo, con esos mega bigotes tan disparatados. La verdad es que haber hecho este trabajo a caballo entre Málaga y San Francisco fue una experiencia fabulosa, recogiendo inspiración de ambos ambientes tan distintos, sobre todo dejando que la naturaleza entrara en el álbum como otro personaje más.
3. ¿Qué ilustración te resultó más fácil y cuál más difícil de ilustrar? ¿Cuál es tu favorita?
La más fácil o las más sencillas son aquellas que aparecen sin mucho decorado o meramente aclaratorias, como caras de personajes y ese tipo de detalles. Y las más complejas son aquellas en donde la composición y la riqueza de elementos en el escenario son de elevada factura; es decir, aquellas en donde hay mucho trabajo. La que más me gusta es esa doble en donde aparece Bernardo entre árboles y otro ciclista en la carretera; además recuerdo perfectamente que la hice en Berkeley, mirando a la Bahía de San Francisco de vez en cuando.
4. ¿Te identificas con Bernardo, el personaje de la historia? ¿Por qué?
Absolutamente, ya que siento su rebeldía como propia. Soy muy cabezón y me encanta el bello en el cuerpo, el de la mujer, también, si no, más. La naturaleza es muy sabia. Aunque nos empeñemos en parecer muñecos de plástico.
5. ¿Qué quisiste transmitir en tu proceso creativo con El ciclista con bigote?
La alegría y determinación de Bernardo, su optimismo que hago mío y por supuesto el valor de la naturaleza en nuestras vidas.
6. ¿De dónde recogiste la inspiración para la ilustración en acuarela?
La acuarela ha formado parte de mi vida desde que mi padre me animó a usarla, así que no concibo otro modo de ilustrar.
7. ¿Concibes tu vida sin ilustrar? ¿Lo haces a diario?
A medida que ilustras libros y llevo más de 40, y como cualquier trabajo, cansa, pero es cierto que amo pintar. Sobre todo cuando es para mí. Ahora empiezo un nuevo camino
como contador de historias, algo que siempre hice, pero que ahora se hace realidad. No siempre pinto, a veces descanso para retomar con ilusión renovada.
8. ¿Es difícil ilustrar en acuarela? ¿Qué consejo darías a los principiantes?
Es la técnica más difícil de pintura, porque no tienes mucho margen de error, de modo que debes tener muy claro dónde van las manchas claras y oscuras, es decir, las luces y las sombras. Les diría que miren muchos vídeos, que los hay, en donde se ve el proceso. Los tonos claros, las luces, siempre van primero y sobre éstas, vamos añadiendo capas más oscuras. Práctica, práctica y práctica, no hay más secretos. Ah, y perder el miedo a estropear el trabajo.
9. ¿Por qué leer este libro? ¿Qué beneficios recoge el lector?
Este libro es ante todo una aventura, un antídoto contra lo establecido, lo prohibido y un viaje de alguien muy cabezón que no duda en escuchar su propia voz interior, algo que casi nunca hacemos, en una sociedad sumida en una manada que asusta. Se reivindica la esencia de cada persona, aquello que nos hace únicos y nos diferencia del resto; en la diversidad encontramos el equilibro.
10. ¿Tienes alguna anécdota sobre el proceso de creación de este libro?
Cuando volvía de correr por Berkeley y tenía que sentarme a pintar, añadía ciervos, ésos con los que me cruzaba por los jardines, algo que me hacía muy feliz.
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